miércoles, 10 de julio de 2024

 

LOS 70 AÑOS DE LA TELEVISIÓN COLOMBIANA

Un acontecimiento de enorme trascendencia estamos viviendo en estos días y es la celebración de los 70 años de la televisión colombiana, la cual, como un gran medio de comunicación está  íntimamente ligado a todos los campos de la vida nacional, regional, local, cultural, académica, gubernamental, intelectual y económica, pero, sobre todo, relacionado con los desarrollos tecnológicos de los medios de comunicación audiovisuales, como soporte indispensable para llevar los mensajes de las imágenes y sus diversos contenidos, llenos de vigor a toda Colombia. Y, obviamente, su conexidad con el derecho a la libertad de expresión es un asunto que no podemos desconocer y que sería un capítulo aparte, o mejor, de toda una investigación y de una obra completa porque son muchos los aspectos que tendrían que examinarse.

Por eso, nos haríamos bastante extensos si nos detuviéramos a comentar aspectos tan vitales como la historia de la televisión, que necesariamente está unida e inseparable del discurrir de la vida de nuestra vida.

Por ejemplo, al nacer la televisión, vivíamos la mala época, llamada de la violencia política, que no ha cesado por el surgimiento de otras violencias como las que provienen de los grupos alzados en armas, del narcotráfico y de la delincuencia, por solo citar algunas de estas manifestaciones.

Recordamos, entonces, que esa fecha del nacimiento de la televisión, que fue el 13 de junio de 1954, se cumplía el primer año de gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla, conocido como el jefe supremo de las fuerzas armadas, también ese día fue la muerte de varios estudiantes que protestaban contra el gobierno de entonces.

Aunque había la esperanza de que la censura, vigente desde años atrás, contra la prensa y la radio, al menos se iba a morigerar un poco, esta esperanza no pasó de una fallida expectativa.

En fin, en ese medio político nació nuestra televisión, que años después de estar sujeta, no al Estado, sino a cada gobierno de turno y a su legislación, fue ampliando su quehacer con el surgimiento de programas de distintas modalidades y contenidos. Son asuntos tan importantes que la misma televisión y los demás medios de comunicación los han comentado en estos días.

Por ejemplo, un hecho que marcó y lo hizo de manera trascendental, en este campo, fue el estímulo de la televisión nacional para el nacimiento de la televisión regional, que empezó en el departamento de Antioquia, con su canal, Teleantioquia, que inauguró el 11 de agosto de 1985, fecha que conmemora nuestra independencia, ceremonia que encabezó en entonces presidente Belisario Betancur, con la ministra de comunicaciones, Nohemí Sanín.

Y tendríamos que abarcar la historia de la televisión, cuando le llegó el color, de la televisión privada, de la televisión regional, de los tipos de televisión como la analógica, la digital, la terrestre, por cable y por satélite, por solo hacer este breve comentario.

En síntesis, sabemos que se están realizando distintos y muy ricos programas nacionales y en distintas ciudades del país para destacar los valiosos aportes de la televisión en Colombia, que debemos aprovechar para tener una más grande ilustración.

jueves, 21 de marzo de 2024

 

LA EFICACIA SIMBÓLICA DE UNA ASAMBLEA CONSTITUYENTE

Dice nuestra Constitución Política de 1991, en su artículo 1, que: “Colombia es un Estado Social de Derecho, organizado en forma de República unitaria, descentralizada, con autonomía de sus entidades territoriales, democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del interés general”.

 Si nos detuviéramos para analizar este texto y entender el sentido, el alcance y, sobre todo, verificar el cumplimiento de sus mandatos, necesitaríamos mucho tiempo y casi que nunca acabaríamos. Igual sucede con el contenido de todas las normas jurídicas, tanto las que están en la Carta Magna, que acabamos de citar, como las que están en las muchas leyes que tenemos, aunque sí es necesario advertir que, toda disposición legal, tiene o debería estar relacionada con todas las normas superiores.

Sin embargo, es necesario insistir en un aspecto esencial para tenerlo siempre muy presente y es el relativo a comprobar si los mandatos de las normas jurídicas, en la realidad, se realizan, como es el deber ser de tales disposiciones, o, por el contrario, no son más que partes de las llamadas “buenas intenciones”. En otras palabras, será que se expide la norma, y se cree que ya el problema está resuelto. Es decir, la eficacia y los efectos de la norma están en su expedición, acompañada de amplia difusión, en cuya tarea, es importante la participación de los medios de comunicación.

Para ampliar las afirmaciones que acabamos de hacer, tenemos una excelente obra que recomendamos y debemos consultar, no solo para este caso, sino en general, cuando se trata de asuntos legales, y sobre situaciones específicas de orden público en Colombia. Dicha obra se llama: La eficacia simbólica del derecho del doctor Mauricio García Villegas. Con el debido respeto, tomamos esta corta cita, que es bastante pertinente:

“El derecho ha sido un instrumento político indispensable para encontrar un mundo posible e intermedio entre esos dos espacios sociales: entre el mundo salvaje de las rutinas que no se someten a las leyes y el mundo moderno y ajeno de las leyes que le dan la espalda a los hechos y a las costumbres. El derecho nos ha permitido mantener esos dos mundos discordantes (en medio de la esquizofrenia) sin tener que sufrir el costo de renunciar a uno de ellos; utilizando cada uno según las necesidades y los vientos que corren, con todo lo bueno y lo malo que ello implica. Para bien y para mal, el derecho ha sido la argamasa semántica que nos ha permitido vivir entre el pasado y el futuro, entre las ruinas y las ilusiones, escamoterando el presente”. (Pág. 36)

Precisamente, en Colombia, a pesar de que tenemos la Constitución de 1991, que ha sido reformada en muchas veces, sin alcanzar su pleno desarrollo, ahora, según el presidente, se requiere de una Asamblea Constituyente, para nuevas reformas en varios asuntos importantes, entre ellos, por ejemplo, en el campo de la justicia, cuando ya tenemos una comisión que trabaja en dicha propuesta. Por tanto, no se requiere de Asamblea Constituyente, ni tampoco tal propuesta puede tener efecto simbólico de que se encontró el camino para resolver graves problemas que tenemos

Esta es la respuesta que le damos al presidente de la república, cuando el día viernes 15 de marzo de 2024, en la ciudad de Cali, ante la minga indígena y otros asistentes, dijo: “Colombia debe ir a una Asamblea Nacional Constituyente. Colombia no se tiene que arrodillar. El triunfo popular del 2022 se respeta y la Asamblea Nacional Constituyente debe transformar las instituciones para que le obedezcan al pueblo su mandato de paz y de justicia”. Texto de El Colombiano, marzo 16 de 2024, página 10.

 

 

viernes, 16 de febrero de 2024

 

EL GOBERNANTE TIENE EL DEBER DE SABER COMUNICAR

Las recientes actuaciones y declaraciones de los funcionarios más cercanos al presidente de la república, como son los ministros de hacienda y crédito público, de relaciones exteriores y de deportes, han creado un ambiente de incertidumbre en todo el país, porque sus palabras no son tan claras y concretas, como deberían ser, que finalmente, no sabemos qué es lo que está pasando en el alto gobierno y, sobre todo, porque los mensajes para comunicar sus decisiones de interés colectivo, son confusos y muchas veces hasta contradictorios frente al deber de respetar la constitución y, la ley, en cada materia especifica, y especialmente, nunca faltar a la verdad, como parte del derecho de la sociedad a ser bien informada.     

Tal situación tiene efectos perversos y dañinos en una democracia, donde uno de sus principios esenciales consiste en presumir que los acuerdos y los desacuerdos, tanto entre los ciudadanos, como entre éstos y los gobernantes, y entre los mismos gobernantes de distinto orden, siempre requieren, como fundamento básico, para propiciar, la que hemos dicho tantas veces, necesaria deliberación pública, que se expresen en un lenguaje que, frente a la realidad, siempre tengan como soporte la verdad, un término que seguramente, todas las veces creará polémica, pero lo importante es controvertir con soportes sólidos.

Por ejemplo, en el reciente caso, de los dineros aprobados por el congreso para garantizar la realización de obras de inmensa trascendencia pública en la ciudad de Bogotá y en el departamento de Antioquia, desaparecieron de los compromisos que dijo tener el alto gobierno. Y, como era apenas lo normal de esperarse en este tipo de asuntos públicos, que por su propia naturaleza demandan el interés colectivo, que vino la reacción de las autoridades regionales porque la información del ministerio de hacienda, excluía dicho dinero, ya comprometido, y en consecuencia faltaba a la verdad.

Después del alboroto en toda Colombia, y del papel de los medios de comunicación, que investigaban y contaban sobre estos hechos noticiosos, que originaron, además, la salida de empleados que llevaban varios años de trabajo, sin estar en esas posiciones por motivación y representación política sino porque eran cargos con claro requisitos de conocimientos técnicos, el gobierno dijo que corrigió el error para que la situación regresara al lugar donde debía permanecer.

Sobre el ministerio de relaciones exteriores, su titular ha debido, sin demora alguna, acatar la suspensión provisional, retirarse del cargo y asumir la defensa, pero no manifestar, confusamente y arbitrariamente, que su designación o remoción dependía del superior que es el presidente de la república. No. Siempre hay que respetar las competencias de otros órganos del Estado.

Y del ministerio del deporte es mucho lo que se ha dicho, tanto por altos funcionarios de Colombia, como por otras instituciones y personas conocedores de la materia, que finalmente, en medio del caos y del desorden informativo, lo que se sabe con certeza es que Colombia, Barranquilla y ciudades cercanas, perdieron la gran oportunidad de realizar los juegos panamericanos de 2027, que, desde ahora, anunciaban grandes certámenes con muchos beneficios.

La conclusión inevitable pero necesaria y dolorosa es aceptar que los gobernantes de todo orden, tienen el deber de saber comunicar y uno de los requisitos es siempre decir la verdad.

 

 

 

 

 

viernes, 26 de enero de 2024

 

VOCES DE OPTIMISMO PARA EL AÑO 2024

Seguramente, que cada persona, empieza el año, casi como de costumbre, con muchos proyectos, entre ellos, algunos que se repiten siempre y nunca se logran realizar. Ante esta situación, consideremos que los medios de comunicación, entre sus labores básicas que tienen, como voceros autorizados y legitimados de la sociedad que, por naturaleza representan, deberíamos pensar muy en serio sobre el presente año y, sobre todo, que no solamente expresemos y deseemos optimismo, sino que trabajemos en forma positiva y llenos de entusiasmo para que haya, en forma permanente, optimismo todo el año 2024.

¿Por qué es tan importante el optimismo?, será la pregunta recurrente. Por eso, debemos tener razones para argumentar y explicar el sentido de esa conducta que proponemos. Empezamos por decir que, desde el primero de enero, tenemos nuevos gobernadores, diputados, alcaldes, concejales y ediles, en toda Colombia. Cada autoridad llega rebosante de ideas que buscarán convertirlas en proyectos y ejecutarlos en los planes de desarrollo que cada uno formuló como aspirante al cargo público.

Ahora, podríamos agregar que también son muchas las razones para manifestar que la propuesta de VOCES DE OPTIMISMO PARA EL AÑO 2024, en esencia, tiene como un gran referente, sin desconocer otros, conocer las actividades que realizan las autoridades, porque de ese trabajo, de esa conducta y de las comunicaciones que salen de éstos, más que funcionarios, como servidores de los ciudadanos que los escogimos, es de donde tenemos la suficiente información para participar en la misión que nos corresponde, en el amplio sentido de evaluar y de insinuar cambios en los trabajos de las autoridades, si consideramos que son necesarios.

En otras palabras, se trata de crear, de tener y de estimular una permanente y positiva deliberación pública, que nos llevará a manifestar que, de esa manera, nos mantenemos con optimismo, porque seremos conscientes de tener gobernantes, con quienes conversamos y quienes nos cuentan qué están haciendo para el bien de toda la comunidad.

Por tanto, de ese espíritu de optimismo, participan las autoridades, la comunidad y los medios de comunicación.  Y ese triángulo es bastante necesario en Colombia y en cualquier parte del mundo, porque si ese ambiente tiene permanencia, con certeza que, en otros lugares como escuelas, colegios, universidades, lugares de trabajo, cafés, bares, en plazas y en nuestras propias casas, todos, finalmente, participamos de ese optimismo, como parte de nuestro comportamiento, que tiene como gran aporte, conseguir que siempre estemos enterados de lo que hacen las autoridades, cuyas ejecutorias están dirigidas al bien común.

Y de esa manera, en una especie de diálogo público o de conversación, con la intervención de muchos de nosotros, podemos hasta hablar sobre los problemas sociales que tenemos, y de entre todos, sugerir medidas para hacerle frente, y que las autoridades llamen siempre a la sociedad, a través de los medios de comunicación para tener contactos constantes y que ellas conozcan qué piensan y qué propone la comunidad. Si actuamos de esta manera en 2024, al final del año, tendremos un balance muy positivo, y de esa manera, repetirlo cada año y hacerlo extensión a muchos otros campos de la sociedad.

jueves, 21 de diciembre de 2023

 

SALUDO ESPECIAL A LAS NUEVAS AUTORIDADES DE COLOMBIA

Es de conocimiento público que las nuevas autoridades regionales y locales de Colombia, inician el primero de enero de 2024, un nuevo período de gobierno para un periodo de cuatro años.  Por tanto, son muchas expectativas en todos los campos sobre el futuro de todo el país y, especialmente, sobre las relaciones de estas autoridades con el presidente de la república que cumple cerca de año y medio como mandatario nacional.

Seguramente, serán muchos los análisis y de distinto contenido que se harán sobre el futuro de esos vínculos gubernamentales, que son tan necesarios en la vida cotidiana de nuestro país, y que, por tanto, deberían tener como primer presupuesto, el ejercicio de una comunicación permanente entre el jefe del Estado, los gobernadores, los alcaldes, las asambleas  y los concejos para lograr derroteros compartidos, todos orientados a superar los múltiples y complejos problemas que tenemos y que cada día son más, y que en la mayoría de las veces, son sin esperanzas de hallar soluciones prácticas y eficaces, como son los anhelos de todos los colombianos.

Y, desde ese panorama, serán los medios de comunicación, los instrumentos que tienen la invaluable misión de difundir los distintos mensajes para crear, propiciar y estimular una amplia deliberación pública que enriquezca las distintitas y ojalá múltiples y diversas posiciones y opiniones, que son tan esenciales para que poco a poco, tengamos consensos alrededor de temas tan trascendentes y su tratamiento como la paz, la salud, la educación, la democracia y la seguridad, por citar solamente algunos de los grandes asuntos que vivimos y nos desvelan a todos los colombianos.

Estas cortas y sencillas palabras, son el fundamento para presentar un saludo muy especial a las nuevas autoridades de Colombia, y pedirles, con un sentido de mucha sensibilidad en todos los campos, que trabajen en forma coordinada por el futuro de todo el país, de manera que la insistente y proclamada búsqueda del bien común, sea posible conseguirla mediante el ejercicio honrado de la autoridad que tienen en sus manos.

Porque de verdad, que requerimos de mucha honestidad para el manejo de las cosas que hacen parte de la administración pública. Por eso, proponemos que haya una campaña intensa y constante, orientada con actos positivos para desterrar la corrupción y una manera sencilla de hacerlo, sería, por ejemplo, mediante el diálogo de las autoridades citadas con sus comunidades y contarles qué están haciendo, qué dinero tienen, cómo se gasta en cada proyecto que estén desarrollando y que las comunidades y sus voceros interroguen a las autoridades, pidan explicaciones y sean veedores. Hagan las investigaciones y las denuncias bien documentadas y ponerlas en conocimiento de los órganos de control y sobre ellos, ejercer también vigilancias. ¿Qué opinan de la propuesta?

  

 

 

viernes, 24 de noviembre de 2023

 

SALUDES PARA LA NAVIDAD Y EL AÑO 2024

 

Con especial alegría, nos anticipamos a saludar a los amigos, los lectores, las autoridades y demás personas cercanas a nuestro portal. Hacemos estas manifestaciones porque estamos terminando un año y muy pronto empezará el siguiente, y todos sabemos que el tiempo es un fenómeno que nunca se detiene ni se detendrá. Por tanto, consideramos que no sobran algunas recomendaciones, aparentemente reiterativas, para esta temporada, porque siempre es conveniente recordarlas y, sobre todo, tenerlas muy presentes y acatarlas en las festividades que muy pronto estarán ocurriendo.

Es muy normal y necesario, tener reuniones familiares, con el fin de compartir momentos de alegría. Y precisamente, a fines de noviembre, recordamos que tuvimos dos puentes seguidos. Diciembre, que es el mes siguiente, sí que será corto porque el viernes 8, día de la Inmaculada Concepción, también celebramos el día de las velitas, y con seguridad, se reparten los primeros buñuelos, en compañía de natilla, como anticipo a las festividades de la navidad. 

Y a partir del día 16 de diciembre, empezamos la novela de la navidad, que concluirá el día 24, con los aguinaldos, repartidos y compartidos en familia.

Por eso, en esta temporada, no podemos olvidar que, entre las celebraciones, está la quema de pólvora, sobre la cual, son múltiples las campañas que ya se están haciendo para evitar que queme a las personas y les pueda causar muchas lesiones, algunas irreparables como la pérdida de órganos vitales como los ojos, o llegar a ocasionar hasta la muerte.

Recordemos que, infortunadamente, cada año, son casi siempre, los niños, los más afectados por la pólvora. Y a pesar de que se les dice a las personas mayores, a los padres de familia y a todo el mundo, que se debe tener cuidado extremo al manipular la pólvora, para evitar desgracias, siempre aumentan los heridos, lo que parece ser una desgracia que, a pesar de las campañas de prevención, no las podemos evitar.

El consumo de alcohol es otro tema que debe tenerse muy en cuenta, porque es verdad que el alcohol hace falta para acompañar las fiestas, pero el consumo tiene que hacerse con el mayor cuidado y como hemos dicho permanentemente, con gran limitación para evitar desgracias familiares. Porque las fiestas tienen que hacerse con bastante alegría, pero sin riesgo alguno, ya que siempre pueden evitarse, como es lo deseable y aconsejable en todo momento. Por eso, expresamos un caluroso y cordial saludo de navidad y año nuevo, en forma anticipada, para que tengamos fiestas alegres y sin riesgo para la vida y la salud.

 


lunes, 23 de octubre de 2023

 

FIDELIDAD A LAS UTOPÍAS

 

Las relaciones sociales siempre tienen y mantienen tensiones, que son inevitables en los diversos campos que surgen como vínculos entre los seres humanos. Tal situación, podemos considerarla como apenas normal en una sociedad diversa y plural.  Y, sobre todo, cuando se proclama que, en ella, existen diversos propósitos, anhelos, ideales, o como el deber ser de las cosas que, también podríamos llamarlas como utopías, entre ellas, por ejemplo, el respeto a la vida, como el derecho humano absoluto.

Una de tales utopías consiste en tener buenos gobernantes, que trabajen, en forma permanente, por mejorar las condiciones de vida de todos los asociados. En la práctica, esta utopía se concreta en la lucha por escoger a quienes, transformen en forma positiva, las condiciones de vida de cada comunidad. Y podríamos seguir comentando otras utopías, como la democracia, que, a pesar de no ser la manera o el sistema más aceptable de gobernar, sí se constituye en la posibilidad de trabajar por un cambio sustancial de cada una de nuestras sociedades.

Estas cortas palabras, nos sirven de soporte para recordar que el domingo 29 de octubre de 2023, tendremos en toda Colombia, el proceso electoral para elegir a los gobernantes de los departamentos y a los alcaldes de los municipios, junto con las asambleas y los concejos, y los ediles, en aquellos lugares donde exista esta figura, como parte del poder local.

¿Por qué estamos ante la defensa de la fidelidad a las utopías? Porque si todos los ciudadanos y si todas personas, hacemos un ejercicio de reflexión, y nos preguntamos qué está pasando en nuestro alrededor y qué podemos hacer para cambiar la situación que vivimos, necesariamente, tendríamos que afirmar que el camino más apropiado y que debemos seguir es el de escoger al gobernante que consideremos el más competente.  

Pero no nos podemos quedar con la mera decisión de escoger al gobernante, tendremos que agregar otra utopía que es vigilar el trabajo del gobernante y pedirle rendición de cuentas, porque de esa manera, podríamos criticar las acciones que califiquemos como negativas y proponer otras que son positivas y urgentes de adoptar. De esa manera, las utopías de la democracia, las utopías de control a la autoridad y las otras utopías que tienen conexidad con la sociedad, las haremos realidad.

¡Animémonos, votemos y ejerzamos nuestro poder como gobernados!