viernes, 26 de enero de 2024

 

VOCES DE OPTIMISMO PARA EL AÑO 2024

Seguramente, que cada persona, empieza el año, casi como de costumbre, con muchos proyectos, entre ellos, algunos que se repiten siempre y nunca se logran realizar. Ante esta situación, consideremos que los medios de comunicación, entre sus labores básicas que tienen, como voceros autorizados y legitimados de la sociedad que, por naturaleza representan, deberíamos pensar muy en serio sobre el presente año y, sobre todo, que no solamente expresemos y deseemos optimismo, sino que trabajemos en forma positiva y llenos de entusiasmo para que haya, en forma permanente, optimismo todo el año 2024.

¿Por qué es tan importante el optimismo?, será la pregunta recurrente. Por eso, debemos tener razones para argumentar y explicar el sentido de esa conducta que proponemos. Empezamos por decir que, desde el primero de enero, tenemos nuevos gobernadores, diputados, alcaldes, concejales y ediles, en toda Colombia. Cada autoridad llega rebosante de ideas que buscarán convertirlas en proyectos y ejecutarlos en los planes de desarrollo que cada uno formuló como aspirante al cargo público.

Ahora, podríamos agregar que también son muchas las razones para manifestar que la propuesta de VOCES DE OPTIMISMO PARA EL AÑO 2024, en esencia, tiene como un gran referente, sin desconocer otros, conocer las actividades que realizan las autoridades, porque de ese trabajo, de esa conducta y de las comunicaciones que salen de éstos, más que funcionarios, como servidores de los ciudadanos que los escogimos, es de donde tenemos la suficiente información para participar en la misión que nos corresponde, en el amplio sentido de evaluar y de insinuar cambios en los trabajos de las autoridades, si consideramos que son necesarios.

En otras palabras, se trata de crear, de tener y de estimular una permanente y positiva deliberación pública, que nos llevará a manifestar que, de esa manera, nos mantenemos con optimismo, porque seremos conscientes de tener gobernantes, con quienes conversamos y quienes nos cuentan qué están haciendo para el bien de toda la comunidad.

Por tanto, de ese espíritu de optimismo, participan las autoridades, la comunidad y los medios de comunicación.  Y ese triángulo es bastante necesario en Colombia y en cualquier parte del mundo, porque si ese ambiente tiene permanencia, con certeza que, en otros lugares como escuelas, colegios, universidades, lugares de trabajo, cafés, bares, en plazas y en nuestras propias casas, todos, finalmente, participamos de ese optimismo, como parte de nuestro comportamiento, que tiene como gran aporte, conseguir que siempre estemos enterados de lo que hacen las autoridades, cuyas ejecutorias están dirigidas al bien común.

Y de esa manera, en una especie de diálogo público o de conversación, con la intervención de muchos de nosotros, podemos hasta hablar sobre los problemas sociales que tenemos, y de entre todos, sugerir medidas para hacerle frente, y que las autoridades llamen siempre a la sociedad, a través de los medios de comunicación para tener contactos constantes y que ellas conozcan qué piensan y qué propone la comunidad. Si actuamos de esta manera en 2024, al final del año, tendremos un balance muy positivo, y de esa manera, repetirlo cada año y hacerlo extensión a muchos otros campos de la sociedad.