SALUDO DE BIENVENIDA AL NUEVO
PRESIDENTE DE COLOMBIA
Nos anticipamos al domingo 19 de junio de 2022,
cuando se llevarán a cabo las elecciones presidenciales para escoger la fórmula
que debe gobernar a Colombia en el próximo periodo de cuatro años, que empieza
el 7 de agosto de 2022 y termina en la misma fecha de 2026. En principio,
formulamos votos porque este acontecimiento sea pacífico en todo el territorio
nacional. Luego, que celebremos con mucha tranquilidad y esperanzas, las
grandes expectativas que tenemos, porque con seguridad, vendrán días muy
difíciles por los muchos problemas que debemos enfrentar.
Por eso, de la manera más humilde, pero al mismo
tiempo sincera y prudente, presentamos un gran saludo de bienvenida al que sea
elegido nuevo presidente de la república, porque sabemos que va a necesitar de
un muy bien calificado equipo de trabajo para estudiar con sumo cuidado las
propuestas que se pondrán en marcha para que, poco a poco, se allanen los
caminos que sean razonables para avanzar en las soluciones que se reclaman
con suma urgencia en diferentes campos.
No es indispensable detenernos demasiado para
que, en este corto saludo, recordemos que los múltiples problemas que
enfrentamos, reclaman la atención inmediata y no dan espera, porque el transcurso
del tiempo nos está demostrando la urgencia para actuar. Y para solo mencionar
algunas situaciones, podríamos afirmar que son incontables los colombianos
que no tienen alimentos, productos que cada día se encarecen más y limitan las
posibilidades de su adquisición. Asimismo, es muy grave la inseguridad en
ciudades y campos, con el incremento de acciones que cada día afectan a más a
las personas y a sus bienes.
Cuando pensamos en los habitantes de Colombia,
sabemos que muchos niños y gran cantidad de ancianos están desamparados por
también diversas razones. La niñez y la infancia, que deberían tener la
atención prioritaria y la requerida en alimentos, en estudio y en salud, lo que
hallamos son enormes deficiencias que, sobra decir, traen consecuencias
irreparables para el resto de sus vidas.
En relación con los ancianos, pocos son los que
cuentan con familias que los atiendan y les brinden la satisfacción a las
necesidades básicas de alimentación, vivienda y salud. Son muchos los ancianos
que, por distintas circunstancias de la vida, viven esta etapa de la vida,
solos. Tienen que pasar los días en hogares que solo están en capacidad de
ofrecer una atención con muchas limitaciones. Otros, viven de la caridad
pública, para poder recoger algunas monedas que medianamente les permiten pagar
una pieza y comer un pan.
En fin, nos haríamos muy extensos si
continuáramos refiriéndonos a los grandes problemas que vivimos en nuestra
sociedad. Por tanto, le corresponderá al próximo gobierno, con el apoyo de muchas
instituciones, acertar en la solución porque los diagnósticos ya los conocemos.
Por consiguiente, desde ahora, al saludar al
nuevo mandatario colombiano, le auguramos que acierte en todo lo que vaya a
hacer, porque los diagnósticos ya se conocen hace mucho tiempo, lo que falta es
la acción constante y honrada de las autoridades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario