El proceso electoral y
el derecho a la información
El domingo 25 de octubre de 2015,
los colombianos que ejerzamos el derecho al voto, elegiremos gobernadores,
alcaldes, diputados, concejales y miembros de las Juntas Administradores
Locales. Pero, para que podamos tomar la
decisión que consideremos es, según nuestros criterios, la más adecuada,
necesitamos estar lo suficientemente informados de las propuestas de todos los
candidatos. Y, para alcanzar ese gran propósito de ilustración, es indispensable,
contar con el apoyo de los medios de comunicación.
Por consiguiente, estamos
viviendo unos días de agitación ideológica que promueven los aspirantes, quienes
ya están inscritos ante la autoridad electoral y cada día se intensifica el
proceso electoral. Por eso, la tarea de los medios de comunicación, además, de
contar cuáles son los candidatos acreditados, también les corresponde una misión
esencial de orientación pedagógica, de manera que todos los ciudadanos tengan
el conocimiento básico para entender el proceso electoral, deliberar sobre el
mismo y después votar.
En otras palabras, el derecho a
la información, que en esta oportunidad
tiene relación con las próximas elecciones, sólo será posible satisfacerlo
plenamente, cuando los aspirantes tengan, en igualdad de condiciones, acceso a
los medios de comunicación para explicar, difundir y confrontar sus propuestas.
Y, también, cuando los mensajes ideológicos, para convencer a los electores,
sean claros y concretos en sus
contenidos. Y, además, que los receptores, que somos todos los ciudadanos,
estemos bien enterados de los distintos programas.
A lo anterior, tenemos que
agregar que nuestro sistema político, que proclama una democracia, más
participativa que representativa, igualmente, hace parte del proceso electoral.
Por eso, las autoridades respectivas, están en el deber de hacer realidad el
conjunto de garantías que sean
pertinentes.
En esencia, podemos afirmar que
nos preparamos para unas elecciones que demandan conocimiento previo sobre las
propuestas. Al mismo tiempo, requerimos de un gran espacio de diálogo público,
que permita la intervención de todos los interesados. También garantías y
vigilancia de las autoridades para evitar situaciones irregulares. Veeduría de
la sociedad, ejercida por medio de instituciones serias, competentes y
honradas. Y, como un gran soporte, del antes llamado “cuarto poder”, hoy,
considerado por muchas razones, como el “primer poder”, que lo constituye el
conjunto de medios de comunicación, para que como grandes garantes de la
información oportuna, transparente,
pertinente, pedagógica, y podríamos añadir más calificativos,
contribuyan a una comunidad bien informada, para que decida con conocimiento y
luego esté alerta a reclamar el cumplimiento de los compromisos adquiridos por
quienes gobernarán en nombre de una sociedad que creyó en planes concretos para
avanzar en la consolidación de una democracia, cada vez más real, social y
digna de un país que, como Colombia, sigue con grandes expectativas empeñada en
un mañana más solidario y pacífico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario