El Círculo de Periodistas y Comunicadores Sociales de Antioquia, CIPA, realizó los días jueves 23 y viernes 24 de septiembre del presente año, el Segundo Congreso Internacional de Periodismo Científico. Fue un acontecimiento de inmensa trascendencia, tanto por los conferencistas que participaron, como por los temas tratados. En esencia, todos coincidieron en la necesidad de tener periodistas y comunicadores competentes para contarle a la sociedad, en un lenguaje comprensivo, el aporte de la ciencia y su significado en la solución de tantos problemas que todos los días nos agobian.
Uno de los aspectos que tienen bastante relación con nuestro trabajo profesional es el alusivo a las telecomunicaciones. En concreto, a la necesidad de tener un satélite que facilite las comunicaciones. Al respecto, se tiene una experiencia muy positiva en la Universidad Sergio Arboleda, que ha liderado un grupo de profesores, preocupados porque somos un país que, a pesar de nuestra posición geográfica privilegiada, aún no contamos con un satélite. Recordemos que han pasado dos licitaciones, un poco recientes y en ambos casos, se han declarado desiertas porque los proponentes no cumplieron los requisitos de la convocatoria.
Las telecomunicaciones están presentes en la telefonía, la radio, la televisión, la internet y, en general, en todos los medios de comunicación, por el fenómeno que se llama convergencia, es decir, todo medio de comunicación, sea impreso, sonoro o audiovisual, tiene su edición electrónica, para mantenerse al día en la difusión del acontecer.
Todo lo anterior, tenemos que relacionarlo con la función esencial de los medios de comunicación, para difundir contenidos y entre ellos, destacar los que provienen del trabajo del científico. Por consiguiente, un debate, que fue bastante interesante en el Congreso, tuvo como punto central, el interrogante: ¿están los periodistas preparados para difundir la ciencia? Sabemos que en nuestro medio, no contamos con universidades que ofrezcan programas para formar periodistas y comunicadores, competentes para difundir la ciencia. Quienes realizan dichas actividades, lo hacen, porque en forma individual, se han capacitado. Precisamente, sobre este aspecto, se hicieron varias recomendaciones que se deben tener en cuenta.
En resumidas cuentas, la sociedad, que tiene el derecho a ser informada de los acontecimientos que, por su propio contenido, le interesan, está en la expectativa de contar con profesionales competentes que cumplan esta misión. Al mismo tiempo, los medios de comunicación deben dedicar parte del espacio, para esta difusión. Y las universidades, dar a conocer todo el acervo científico que tienen, para que finalmente, todos estemos enterados, como debe ser.
martes, 28 de septiembre de 2010
martes, 21 de septiembre de 2010
¿Por qué otra palomita presidencial?
Nuevamente, recordamos a los periodistas, la necesidad de conocer muy bien el lenguaje jurídico para informar de manera adecuada a la sociedad, que además de confiar en dichos profesionales, éstos deben ser competentes para la difusión de mensajes ajustados a la verdad. Por eso, con motivo del próximo segundo viaje del presidente Juan Manuel Santos Calderón al exterior,han dicho algunos medios de comunicación que, vuelve a ser presidente encargado de Colombia, el ministerio del interior y de justicia, Germán Vargas Lleras. Tal mensaje no corresponde a la verdad. Porque para reemplazar al presidente de la república está elegido, junto con él, el vicepresidente, que es el colega periodista Angelino Garzón.
Por tanto, debemos empezar por aplicar correctamente, el verbo reemplazar. Tal acontecimiento ocurre, cuando el titular del cargo se separa temporal o definitivamente del cargo. Para aclarar esta situación, basta con leer el artículo 194 de la Constitución Política, que dice: "Son faltas absolutas del presidente de la república su muerte, su renuncia aceptada, la destitución decretada por sentencia, la incapacidad física permanente y el abandono del cargo, declarados estos dos últimos por el Senado.
Son faltas temporales la licencia y la enfermedad, de conformidad con el artículo precedente y la suspensión en el ejercicio del cargo decretada por el senado, previa admisión pública de la acusación en el caso previsto en el numeral primero del artículo 175".
En cambio: "Cuando el presidente de la república se traslade a territorio extranjero en ejercicio de su cargo, el ministerio a quien corresponda, según el orden de precedencia legal, ejercerá bajo su propia responsabilidad las funciones constitucionales que el presidente le delegue, tanto aquéllas que le son propias como las que ejerce en calidad de jefe de gobierno. El ministro delegatario pertenecerá al mismo partido o movimiento político del presidente". Inciso tercero del artículo 196.
En resumen, debe quedar claro que al presidente de la república, lo reemplaza, solamente, el vicepresidente, en las faltas temporales o absolutas. En cambio, cuando va al exterior, en misión oficial, no puede decirse que el presidente se ha separado del cargo, ni que otro funcionario lo reemplaza. Porque el ministro delegatario no hace reemplazos y, por tanto, no asume funciones de presidente encargado de la república y, en consecuencia, no tiene la "palomita" como presidente.
La anterior confusión, debe quedar resuelta y es conveniente que llegue a conocimiento de todos los periodistas para que no informen, de manera equivocada a la comunidad. Y también, este mensaje, le es conveniente a los ciudadanos, porque todos estamos en el deber de saber lo mínimo de nuestro derecho, ojalá, en las principales áreas del mismo.
Por tanto, debemos empezar por aplicar correctamente, el verbo reemplazar. Tal acontecimiento ocurre, cuando el titular del cargo se separa temporal o definitivamente del cargo. Para aclarar esta situación, basta con leer el artículo 194 de la Constitución Política, que dice: "Son faltas absolutas del presidente de la república su muerte, su renuncia aceptada, la destitución decretada por sentencia, la incapacidad física permanente y el abandono del cargo, declarados estos dos últimos por el Senado.
Son faltas temporales la licencia y la enfermedad, de conformidad con el artículo precedente y la suspensión en el ejercicio del cargo decretada por el senado, previa admisión pública de la acusación en el caso previsto en el numeral primero del artículo 175".
En cambio: "Cuando el presidente de la república se traslade a territorio extranjero en ejercicio de su cargo, el ministerio a quien corresponda, según el orden de precedencia legal, ejercerá bajo su propia responsabilidad las funciones constitucionales que el presidente le delegue, tanto aquéllas que le son propias como las que ejerce en calidad de jefe de gobierno. El ministro delegatario pertenecerá al mismo partido o movimiento político del presidente". Inciso tercero del artículo 196.
En resumen, debe quedar claro que al presidente de la república, lo reemplaza, solamente, el vicepresidente, en las faltas temporales o absolutas. En cambio, cuando va al exterior, en misión oficial, no puede decirse que el presidente se ha separado del cargo, ni que otro funcionario lo reemplaza. Porque el ministro delegatario no hace reemplazos y, por tanto, no asume funciones de presidente encargado de la república y, en consecuencia, no tiene la "palomita" como presidente.
La anterior confusión, debe quedar resuelta y es conveniente que llegue a conocimiento de todos los periodistas para que no informen, de manera equivocada a la comunidad. Y también, este mensaje, le es conveniente a los ciudadanos, porque todos estamos en el deber de saber lo mínimo de nuestro derecho, ojalá, en las principales áreas del mismo.
miércoles, 15 de septiembre de 2010
La cuarta feria de la cultura y el libro
Estamos celebrando en Medellín, la cuarta feria de la cultura y el libro. Es una oportunidad excepcional, para que nos acerquemos al Jardín Botánico, y participemos en las distintas actividades que allí se realizan hasta el próximo domingo 19 de septiembre. En estos días, se ha podido observar la gran cantidad de personas, desde niños, jóvenes, estudiantes, padres de familia, conferencistas y libreros, quienes han estado atentos en las labores de música, teatro, recreo, y hasta la concurrencia a los restaurantes.
Uno de los aspectos más sobresalientes tienen que ver con la presencia de destacados columnistas para hablar sobre temas concernientes con el periodismo y su independencia, los derechos de los lectores, las experiencias en el trabajo en los medios de comunicación, los cierres de medios de comunicación, y la celebración de los cien años del periódico El Tiempo, que será el 30 de enero de 2011, entre algunos de los acontecimientos que nos congregan.
También merece atención, la feria del libro. Es una ocasión propicia para apreciar, comparar y comprar muy buenos libros y a precios favorables. Los libros, que son unos amigos inseparables de toda persona, son dignos de ser visitados por todos. De ellos, es mucho lo que se ha escrito y mucho lo que vaticina hacia el futuro, en cuanto que pareciera que su muerte fuera inminente y segura. Sin embargo, la esencia está en que su presencia nos llena de regocijo y son compañeros en todo momento. Por más que llegue la tecnología a la vida de los libros, ellos nunca morirán. Al contrario, la tecnología deberá contribuir a su inmortalidad.
Uno de los aspectos más sobresalientes tienen que ver con la presencia de destacados columnistas para hablar sobre temas concernientes con el periodismo y su independencia, los derechos de los lectores, las experiencias en el trabajo en los medios de comunicación, los cierres de medios de comunicación, y la celebración de los cien años del periódico El Tiempo, que será el 30 de enero de 2011, entre algunos de los acontecimientos que nos congregan.
También merece atención, la feria del libro. Es una ocasión propicia para apreciar, comparar y comprar muy buenos libros y a precios favorables. Los libros, que son unos amigos inseparables de toda persona, son dignos de ser visitados por todos. De ellos, es mucho lo que se ha escrito y mucho lo que vaticina hacia el futuro, en cuanto que pareciera que su muerte fuera inminente y segura. Sin embargo, la esencia está en que su presencia nos llena de regocijo y son compañeros en todo momento. Por más que llegue la tecnología a la vida de los libros, ellos nunca morirán. Al contrario, la tecnología deberá contribuir a su inmortalidad.
lunes, 6 de septiembre de 2010
Solidaridad con Luis Carlos Cervantes
La defensa de la libertad de palabra, tiene que ser una decisión permanente, no un pronunciamiento coyuntural. Y tiene que defenderse frente a cualquier enemigo, sobre todo, de aquellos que se ocultan en la multitud, en la oscuridad, en el anonimato o en cualquier forma cobarde para evitar que les vean la cara, en vez de tener el valor de asumir la actitud natural de quien quiere expresar un mensaje, especialmente, cuando éste es distinto al nuestro.
El anterior párrafo, sirve de base para unirnos a las voces de los colegas que, al unísono, rechazamos la cobardía de los que se valen de anónimos para amenazar a Luis Carlos Cervantes, corresponsal del Noticiero de Teleantioquia, en el municipio de Tarazá. Porque permitir que se calle la voz de quien ha asumido como un deber suyo, la tarea de contarle a la sociedad, la verdad de lo que en ella sucede, es contribuir pasivamente a que se envalentonen los pusilánimes. Y, tal conducta, no la podemos ejecutar. Todo lo contrario: tenemos que realizar actos de valor, pero todos, unidos, como hombres y empresas que luchamos porque la libertad de expresión se mantenga por encima de cualquier consideración.
Han hecho bien las autoridades policivas con brindarle vigilancia personal y familiar a Luis Carlos Cervantes, pero tal situación no puede prolongarse más tiempo. Es necesario investigar el origen y los autores de esas voces ocultas, para sancionarles ejemplarmente.
En síntesis, rodear a Luis Carlos Cervantes. Y que las autoridades, no sólo vigilen sino que investiguen y que pronto, tenga la tranquilidad, la seguridad y, sobre todo, la libertad para movilizarse por todo el pueblo, investigar qué sucede, denunciar y despertar la conciencia del pueblo, para reconocer que la libertad de expresión es el primer poder de toda comunidad organizada. Y de toda democracia que se precie de ser garantista, como lo establece nuestra Carta Magna. No bajemos la guardia en ningún momento. Por eso, seremos solidarios siempre, como es el deber ser de nuestro compromiso social.
El anterior párrafo, sirve de base para unirnos a las voces de los colegas que, al unísono, rechazamos la cobardía de los que se valen de anónimos para amenazar a Luis Carlos Cervantes, corresponsal del Noticiero de Teleantioquia, en el municipio de Tarazá. Porque permitir que se calle la voz de quien ha asumido como un deber suyo, la tarea de contarle a la sociedad, la verdad de lo que en ella sucede, es contribuir pasivamente a que se envalentonen los pusilánimes. Y, tal conducta, no la podemos ejecutar. Todo lo contrario: tenemos que realizar actos de valor, pero todos, unidos, como hombres y empresas que luchamos porque la libertad de expresión se mantenga por encima de cualquier consideración.
Han hecho bien las autoridades policivas con brindarle vigilancia personal y familiar a Luis Carlos Cervantes, pero tal situación no puede prolongarse más tiempo. Es necesario investigar el origen y los autores de esas voces ocultas, para sancionarles ejemplarmente.
En síntesis, rodear a Luis Carlos Cervantes. Y que las autoridades, no sólo vigilen sino que investiguen y que pronto, tenga la tranquilidad, la seguridad y, sobre todo, la libertad para movilizarse por todo el pueblo, investigar qué sucede, denunciar y despertar la conciencia del pueblo, para reconocer que la libertad de expresión es el primer poder de toda comunidad organizada. Y de toda democracia que se precie de ser garantista, como lo establece nuestra Carta Magna. No bajemos la guardia en ningún momento. Por eso, seremos solidarios siempre, como es el deber ser de nuestro compromiso social.
lunes, 30 de agosto de 2010
Desierta la licitación para avanzar con el "Gobierno en Línea"
Es una lástima la noticia que trae el portal del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones: Desierta la licitación para avanzar con el "Gobierno en Línea". Así nos cuenta lo ocurrido: "El Ministro Molano informó que la decisión de declarar desierto el proceso licitatorio 02 del 2010, se tomó teniendo en cuenta las observaciones de la Procuraduría General de la Nación, de la oficina del Zar Anticorrupción y el respaldo de un concepto jurídico solicitado a la firma DeVivero & Asociados S.A., experta en contratación estatal. Y el análisis integral realizado por el comité evaluador, lo que permitió concluir a la entidad que los proponentes que se presentaron no cumplían con los requisitos".
Es más grave aún, por lo que sostiene la parte final de la noticia: "Colombia es el país líder en América Latina y el Caribe en gobierno electrónico y participación electrónica y el noveno a nivel mundial en la oferta de servicios de Gobierno en línea, de acuerdo con el último reporte de Naciones Unidas. La intranet gubernamental, es una plataforma tecnológica que soporta los servicios de Gobierno en línea, el Centro de Datos del Estado, el Centro de Contacto ciudadano y una red para intercambio eficiente de información entre entidades públicas. va a la vanguardia en este gran proceso democrático de acceso a la información".
Por lo anterior, nos preocupa lo ocurrido,pues, esperar una nueva licitación tarda tiempo, difícil de recuperar y, sobre todo, no podemos vaticinar los nuevos tropiezos que podrían presentarse.
Lo antes expresado, nos convoca a enterarnos de que en Colombia, el "Gobierno en Línea" es el desarrollo de una gran estrategia que ha permitido a las autoridades, comunicarse con la sociedad, informarle de los asuntos de interés público, y facilitarle muchas gestiones, todos los días, durante las 24 horas y el año entero.
En síntesis, es una forma de auspiciar el acceso a la información pública, de estimular la consulta de los portales de las distintas entidades del Estado, de democratizar el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones para bien de toda la sociedad. Además, de impulsar planes para aumentar la cobertura, de desarrollar actividades de enseñanza que, en esencia, es una especie de "alfabetización electrónica", de manera que un adecuado entrenamiento, capacite a las personas para el acceso, uso y aprovechamiento. Pero al mismo tiempo, se tiene que ser consciente de la necesidad de contar con equipos electrónicos en establecimientos públicos como bibliotecas y algunas oficinas del Estado, de modo que los interesados tengan lugares a donde ir a aprender y donde, después, puedan utilizar lo aprendido para muchas consultas.
Por eso, el "Gobierno en Línea" es otra forma concreta de propiciar el ejercicio del derecho a la información, otra manera de hacer realidad la democracia participativa en los medios digitales, gracias a la capacitación que brinda el Estado, en forma gratuita, y que es una nueva enseñanza para estar al día, en materia de tecnología, que todos colombianos necesitamos, con urgencia, si no queremos estar cada día, más atrasados, ignorantes y alejados de muchas posibilidades que encontramos en nuestro medio.
Es más grave aún, por lo que sostiene la parte final de la noticia: "Colombia es el país líder en América Latina y el Caribe en gobierno electrónico y participación electrónica y el noveno a nivel mundial en la oferta de servicios de Gobierno en línea, de acuerdo con el último reporte de Naciones Unidas. La intranet gubernamental, es una plataforma tecnológica que soporta los servicios de Gobierno en línea, el Centro de Datos del Estado, el Centro de Contacto ciudadano y una red para intercambio eficiente de información entre entidades públicas. va a la vanguardia en este gran proceso democrático de acceso a la información".
Por lo anterior, nos preocupa lo ocurrido,pues, esperar una nueva licitación tarda tiempo, difícil de recuperar y, sobre todo, no podemos vaticinar los nuevos tropiezos que podrían presentarse.
Lo antes expresado, nos convoca a enterarnos de que en Colombia, el "Gobierno en Línea" es el desarrollo de una gran estrategia que ha permitido a las autoridades, comunicarse con la sociedad, informarle de los asuntos de interés público, y facilitarle muchas gestiones, todos los días, durante las 24 horas y el año entero.
En síntesis, es una forma de auspiciar el acceso a la información pública, de estimular la consulta de los portales de las distintas entidades del Estado, de democratizar el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones para bien de toda la sociedad. Además, de impulsar planes para aumentar la cobertura, de desarrollar actividades de enseñanza que, en esencia, es una especie de "alfabetización electrónica", de manera que un adecuado entrenamiento, capacite a las personas para el acceso, uso y aprovechamiento. Pero al mismo tiempo, se tiene que ser consciente de la necesidad de contar con equipos electrónicos en establecimientos públicos como bibliotecas y algunas oficinas del Estado, de modo que los interesados tengan lugares a donde ir a aprender y donde, después, puedan utilizar lo aprendido para muchas consultas.
Por eso, el "Gobierno en Línea" es otra forma concreta de propiciar el ejercicio del derecho a la información, otra manera de hacer realidad la democracia participativa en los medios digitales, gracias a la capacitación que brinda el Estado, en forma gratuita, y que es una nueva enseñanza para estar al día, en materia de tecnología, que todos colombianos necesitamos, con urgencia, si no queremos estar cada día, más atrasados, ignorantes y alejados de muchas posibilidades que encontramos en nuestro medio.
lunes, 23 de agosto de 2010
Defendamos el derecho a la información en Venezuela
El derecho a la información, como derecho universal que es, nos corresponde a todos los seres. Por consiguiente, todos, como titulares y sujetos activos, estamos en el deber de defenderlo. Por eso, frente a los recientes acontecimientos de Venezuela, donde el gobierno estableció la censura para impedir que se difundan las realidades, tales como son, tenemos que pronunciarnos, pues, con el uso arbitrario del poder está impidiendo el pleno ejercicio de un derecho que es esencial para que todo el mundo se entere de los sucesos más importantes de nuestro vecino.
Somos conscientes de que los diferentes hechos, que luego de ser valorados, se convierten en noticias, requieren de un tratamiento cuidadoso por parte del profesional, similar a la conducta de los demás profesionales, en el campo específico de su trabajo. Por consiguiente, frente a los sucesos relativos a delitos como asesinatos, hurtos y estafas y, en general, de aquellos que tienen mayor repercusión en la sociedad y frente a los afectados, los periodistas siempre han de ser prudentes al darlos a conocer. Saben que deben respetar los derechos, tanto del agresor como de la víctima. Pero, lo que no pueden hacer, es ocultar la realidad por cruda que ésta sea. Al contrario, como lo recomiendan los grandes tratadistas y profesores, frente a hechos que son dolorosos para la sociedad, como el terrorismo, el genocidio y todo delito que atente gravemente contra los derechos humanos, de ellos, se informa y se hace, sin que sean tratados como espectáculos vulgares para despertar la morbosidad general, sino, con una actitud profesional que implique un rechazo sincero por lo sucedido, pues, somos todos los seres humanos, sensibles a todo acto cobarde y lesivo de la dignidad humana.
Los principios éticos y la responsabilidad, tanto social como jurídica, exigen mantener un compromiso honesto en el trabajo de una profesión que siempre tiene que estar y ejercerse por el bien común. Por tanto, la censura impuesta en Venezuela, en lugar de contribuir a mejorar el clima interno de descontento y desconcierto, lo que hace, en forma permanente, es acabar con las pocas garantías de un Estado de Derecho, que está en deterioro y que al desaparecer, abre el camino para la dictadura. Con sobrada razón, dicen los tratadistas de la democracia y de las libertades públicas, que cuando se establece la censura, la primera víctima es la verdad, que es la esencia del derecho a la información.
En consecuencia, la libertad de expresión, que tiene en el derecho a la información, una de las formas más concretas de realizarse, desaparece, junto con los pocos derechos que se pueden ejercer tímidamente. Ojalá en Colombia, sigamos respirando, gozando y ufanándonos de un régimen que, por encima de cualquier consideración, respeta y garantiza la libertad de expresión de todos los colombianos y de los habitantes de nuestro país.
Somos conscientes de que los diferentes hechos, que luego de ser valorados, se convierten en noticias, requieren de un tratamiento cuidadoso por parte del profesional, similar a la conducta de los demás profesionales, en el campo específico de su trabajo. Por consiguiente, frente a los sucesos relativos a delitos como asesinatos, hurtos y estafas y, en general, de aquellos que tienen mayor repercusión en la sociedad y frente a los afectados, los periodistas siempre han de ser prudentes al darlos a conocer. Saben que deben respetar los derechos, tanto del agresor como de la víctima. Pero, lo que no pueden hacer, es ocultar la realidad por cruda que ésta sea. Al contrario, como lo recomiendan los grandes tratadistas y profesores, frente a hechos que son dolorosos para la sociedad, como el terrorismo, el genocidio y todo delito que atente gravemente contra los derechos humanos, de ellos, se informa y se hace, sin que sean tratados como espectáculos vulgares para despertar la morbosidad general, sino, con una actitud profesional que implique un rechazo sincero por lo sucedido, pues, somos todos los seres humanos, sensibles a todo acto cobarde y lesivo de la dignidad humana.
Los principios éticos y la responsabilidad, tanto social como jurídica, exigen mantener un compromiso honesto en el trabajo de una profesión que siempre tiene que estar y ejercerse por el bien común. Por tanto, la censura impuesta en Venezuela, en lugar de contribuir a mejorar el clima interno de descontento y desconcierto, lo que hace, en forma permanente, es acabar con las pocas garantías de un Estado de Derecho, que está en deterioro y que al desaparecer, abre el camino para la dictadura. Con sobrada razón, dicen los tratadistas de la democracia y de las libertades públicas, que cuando se establece la censura, la primera víctima es la verdad, que es la esencia del derecho a la información.
En consecuencia, la libertad de expresión, que tiene en el derecho a la información, una de las formas más concretas de realizarse, desaparece, junto con los pocos derechos que se pueden ejercer tímidamente. Ojalá en Colombia, sigamos respirando, gozando y ufanándonos de un régimen que, por encima de cualquier consideración, respeta y garantiza la libertad de expresión de todos los colombianos y de los habitantes de nuestro país.
martes, 17 de agosto de 2010
¿Vuelve la violencia contra los medios de comunicación?
Puede tener mil explicaciones, pero no tiene justificación alguna, el aleve atentado el pasado jueves 12 de agosto, contra la cadena radial Caracol y la agencia de noticias EFE. Porque la violencia, carece de razones, salvo cuando es la única alternativa para ejercer el derecho fundamental a la defensa, frente a un ataque grave, injustificado, inevitable e irremediable.
Un viejo pensador decía que en el mundo existen dos poderes irreconciliables: la espada y la pluma. Sin embargo, decía, la pluma, siempre vencerá, aunque tarde para hacerlo. Por eso, en Colombia y en el mundo entero, quienes seguimos fieles a la utopía de la pluma, que simboliza el derecho a la libertad de palabra o de expresión, nunca renunciaremos a su defensa incondicional, así nos toque pagar con la propia vida.
Consideramos conveniente la unión de todos los que estemos identificados con esta postura. Desde el mismo gobierno, desde los partidos políticos, desde la oposición civilizada, desde las empresas y sus medios de comunicación, de todos los profesionales, de todas las universidades, de todos los centros de estudio. De todos los hombres y mujeres que usamos la razón para argumentar y para guiar los pasos de la vida.
Definitivamente, el terrorismo, como método de lucha, no puede ser admitido por ninguna causa. Al contrario, tenemos que levantar erguida la voz, al unísono, para rechazar enérgicamente a quienes se enceguecen y no saben de derechos humanos, no saben de libertad de expresión. Sólo saben de violencia. A ellos, los tenemos que ahuyentar de nuestro entorno, que se vayan con su ideología y con sus actos criminales donde están sus propios partidarios a ver si algún día, convencidos de su irracionalidad, dejan de causar víctimas.
En defensa de las libertades públicas, en defensa de la paz, en defensa de la convivencia con la diferencia, pero sin violencia, es la respuesta que daremos todos los días, incansablemente. Primero, lo haremos en el desierto, pero pronto, nos oirán en todas partes y el eco, retumbará para siempre, como para siempre es la defensa de la vida de todos los seres humanos, para que, libre y responsablemente, se expresen ante los demás.
Un viejo pensador decía que en el mundo existen dos poderes irreconciliables: la espada y la pluma. Sin embargo, decía, la pluma, siempre vencerá, aunque tarde para hacerlo. Por eso, en Colombia y en el mundo entero, quienes seguimos fieles a la utopía de la pluma, que simboliza el derecho a la libertad de palabra o de expresión, nunca renunciaremos a su defensa incondicional, así nos toque pagar con la propia vida.
Consideramos conveniente la unión de todos los que estemos identificados con esta postura. Desde el mismo gobierno, desde los partidos políticos, desde la oposición civilizada, desde las empresas y sus medios de comunicación, de todos los profesionales, de todas las universidades, de todos los centros de estudio. De todos los hombres y mujeres que usamos la razón para argumentar y para guiar los pasos de la vida.
Definitivamente, el terrorismo, como método de lucha, no puede ser admitido por ninguna causa. Al contrario, tenemos que levantar erguida la voz, al unísono, para rechazar enérgicamente a quienes se enceguecen y no saben de derechos humanos, no saben de libertad de expresión. Sólo saben de violencia. A ellos, los tenemos que ahuyentar de nuestro entorno, que se vayan con su ideología y con sus actos criminales donde están sus propios partidarios a ver si algún día, convencidos de su irracionalidad, dejan de causar víctimas.
En defensa de las libertades públicas, en defensa de la paz, en defensa de la convivencia con la diferencia, pero sin violencia, es la respuesta que daremos todos los días, incansablemente. Primero, lo haremos en el desierto, pero pronto, nos oirán en todas partes y el eco, retumbará para siempre, como para siempre es la defensa de la vida de todos los seres humanos, para que, libre y responsablemente, se expresen ante los demás.
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