miércoles, 11 de marzo de 2015



EL HUMOR COMO EJERCICIO DEL DERECHO A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Un tema sobre el cual valdría la pena detenernos un poco para reflexionar, con la participación de varias personas, es el relativo al humor, entendido como una manifestación del derecho a la libertad de expresión. Con toda certeza que los mensajes y las caricaturas que se originen en el humor son tan amplios y tan ricos que cada día habrá mucho de qué reírnos, burlarnos, entretenernos, hacer chistes, ser mordaz, remedar a los hombres públicos y recrear el diario vivir.  

Precisamente, este domingo 8 de marzo de 2015, el conocido periodista Daniel Samper Pizano publicó en el periódico El Tiempo, en la sección debes leer, una conferencia que lleva por título: En defensa del humor. Transcribimos parte de la misma, que nos servirá para agregar nuestros comentarios.

“El atentado que sufrió el semanario satírico francés Charlie Hebdo el pasado 7 de enero, en el que murieron once personas –entre ellas varios periodistas-, ha puesto sobre el tapete, de la manera más dolorosa, el debate sobre los límites del humor”.

“(…). La reacción social del primer momento fue instantánea: condena de la masacre, solidaridad con las víctimas, defensa de la libertad de expresión como uno de los valores no negociables de una democracia”.

“(…). Sin embargo, no tardó mucho en salir a flote una actitud que, aunque no condenaba la matanza, se preguntaba más o menos, si los humoristas del semanario no se habían ganado a pulso el ataque por pisar los terrenos de los grupos religiosos extremistas”.

Por varias razones, Daniel Samper Pizano defiende el humor. Las podemos resumir, así: “Porque es una forma de expresión que pone armas notables en manos de los débiles.  (…).  Porque es el aceite que permite el rodaje armónico de muchas relaciones, hace más fáciles los caminos y más ambles los entornos. (…). Porque es el más eficaz remedio contra la soberbia, la solemnidad y el fanatismo. (…). Constituye adecuado mecanismo de apoyo y desahogo sicológico”.

Lo que podemos agregar es poco, pero consideramos que un sistema político que impida la libre expresión del humor, lo que hace es causarle un daño irreparable a la sociedad, porque no permite que mensajes creativos, que ponen a pensar a los demás, generalmente inspirados en la vida diaria, sobre todo, de acontecimientos que tienen trascendencia en la comunidad, porque se relacionan con las actuaciones de las autoridades, con las noticias de distintos contenidos, con las acciones y proyectos de entidades privadas, con la prestación de servicios públicos y muchas otras vivencias, sean conocidos por los asociados, que, teóricamente, tienen ese derecho, proclamado en distintas normas jurídicas, empezando por la Constitución Política.

Por lo anterior, proponemos un debate y que sea amplio, en el cual intervengan voces plurales y diversas, empezando por la academia, las organizaciones de distintas profesiones, los movimientos políticos y sociales, las autoridades, los escritores, los periodistas, los columnistas y, en fin, que sea un escenario donde estemos incluidos todos, para reivindicar el derecho a la libertad de expresión y la manera de hacerse realidad y eficaz, que es a través de la libre difusión de los distintos mensajes que constituyen lo que hoy conocemos como el derecho fundamental a la información.